Eliminando a los que nos ayudan, nos sanan, nos enseñan a aprender… haciéndonos más humanos, menos locos y salvajes. Asesinándoles, nos hacemos cada día menos hombre y mujeres. Cuando la mano que intenta ayudar, es refutada, escupida, apaleada… nos arrimamos al precipicio.
Guadix en silencio, en memoria de María Eugenia Moreno, la compañera vilmente tiroteada y muerta en el ambulatorio de Moratalla.